San Salvador | EFE.-
Al menos 4 hectáreas de una zona natural protegida al noroeste de El Salvador fueron consumidas por un incendio forestal, aseguró este domingo el Cuerpo de Bomberos.
La fuente señaló en sus redes sociales que el incendio se dio en la zona protegida del Parque Nacional San Diego y Las Barras, del municipio de Metapan (noroeste), del departamento de Santa Ana, el sábado y que este domingo se verificó la «liquidación» del fuego.
Explicó que en las 4 hectáreas consumidas por el incendio forestal «se quemaron árboles de distintas especies» y que los bomberos inspeccionaron la zona para investigar la causa del fuego.
Por otra parte, el Cuerpo de Bomberos reportó varios incendios en diferentes puntos del país, entre los que se encuentran el de un depósito de reciclajes en la localidad de San Rafael Cedros (este).
La institución también informó sobre incendios en maleza seca en los departamentos de Ahuachapán (oeste), Santa Ana (noroeste) y en un cerro de la capital.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) señaló en un informe especial que se espera el ingreso de ráfagas de vientos de hasta 40 kilómetros por hora y recordó a la población que está prohibida, por decreto del Ejecutivo, «la quema agrícola en períodos de vientos fuertes durante la época seca».
Explicó que estos vientos favorecen «la propagación de incendios forestales y domésticos», por lo que la quema también es prohibida por la Ley Agrícola.
Además de las ráfagas, la cartera de Medio Ambiente y Recursos Naturales prevé que ingresen este domingo vientos con velocidades de entre 12 y 25 kilómetros por hora «con énfasis en zonas de altas», principalmente en los volcanes del oeste del país.
El MARN advirtió sobre este fenómeno desde el pasado 8 de febrero, sin que hasta el momento se reporten víctimas, y que es generado por un flujo «acelerado» con presencia en el Caribe y el resto de la región centroamericana.
El país experimentó una situación similar a mediados de enero pasado, que dejó al menos 6 incendios, en su mayoría originados en maleza seca, y 14 árboles de «gran magnitud» caídos, según Protección Civil.