Bogotá | EFE.-
Con un amplio abanico de bienes y servicios para la industria y una agenda académica que incluye 11 conferencias enfocadas en buscar una caficultura productiva y rentable, arrancó este miércoles en Bogotá «Cafés de Colombia Expo 2022», la feria de cafés especiales más grande de América Latina, que rindió homenaje a las mujeres cultivadoras de la planta.
La feria, que se desarrolla en el Centro Internacional de Negocios y Exposiciones de Bogotá (Corferias) y finalizará el próximo sábado, tendrá el año entrante a Brasil como país invitado, el primero internacional, según lo anunció el gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia (FNC), Roberto Vélez.
«El próximo año tendremos a Brasil como país invitado (…) para poder compararnos, para poder mirarnos», puntualizó el ejecutivo, quien destacó que la Feria de este año vuelve a ser presencial luego de dos años a causa de la pandemia del coronavirus.
El primer día de la feria se convirtió en un hervidero de gente que acudió a los locales en donde cada participante mostraba lo mejor de su cosecha.
Además, fue centro de atención el XVI Campeonato Nacional de Baristas, el XI Campeonato Nacional de Catadores y el VI Campeonato Nacional de AeroPress, de los que Vélez dijo «son ya eventos de tradición en el marco de la feria que atraen a un gran número de espectadores, pues son vitrinas para el talento local y las nuevas generaciones vinculadas a la cadena de valor del café».
Los encargados de cortar la cinta, que marcó el inicio de la feria, fueron la directora ejecutiva de la Organización Internacional del Café (OIC), la brasileña Vanusia Nogueira, y Vélez.
Paralelo a la feria también se desarrolla en Bogotá la 134 reunión anual de su máxima autoridad, el Consejo Internacional del Café (CIC), que culminará el viernes de esta semana, día en el que se dará a conocer un documento sobre las conclusiones de la cita que por segunda vez se realiza en Colombia.
TRIBUTO A LAS MUJERES CAFETERAS
Por otro lado, la feria de cafés especiales también rindió un tributo a las mujeres que cultivan el grano en Colombia y por eso tres de ellas recibieron reconocimientos por su labor en las categorías de calidad, sostenibilidad ambiental y liderazgo.
En esa dirección, Nogueira recibió también el reconocimiento en la categoría de liderazgo internacional.
Cada reconocimiento consistió en una placa simbólica hecha con el residuo que queda en el filtro o en la manga de tela que se utiliza para colar el grano diariamente, conocido como borra de café.
En sostenibilidad ambiental la ganadora fue Magola Ramírez, que entre otros logros ha liderado la siembra de 15.500 árboles nativos desde 2017 en el departamento cafetero de Caldas (centro).
Mientras tanto, Mildred Niebles destacó por la «muy alta calidad» que ha sabido imprimir tanto al grano que produce en su finca, ubicada en la Sierra Nevada de Santa Marta (norte).
Y Rosaura Zapata, una indígena del Cauca (suroeste) y que hace parte de la Guardia Indígena, fue distinguida por su resiliencia, liderazgo y trabajo comunitario.
Gracias a sus gestiones el municipio de Jambaló tiene actualmente un programa de ayuda para niños bajos de peso y un centro de acopio de café. La mujer proyecta adquirir para la comunidad una trilladora y darle valor agregado al café que se produce en la zona.
