San José, (IICA).-
La Dra. Chan lideró, en su calidad de investigadora, el desarrollo del gen HB4, que proviene del girasol, y le confiere tolerancia a la sequía al trigo y a la soja.
Raquel Lía Chan, bioquímica argentina especializada en biotecnología vegetal, quien lideró el desarrollo del gen HB4 que proviene del girasol y que le confiere tolerancia a la sequía al trigo y a la soja, recibió el título “Cátedra IICA en Biotecnología y Desarrollo Sostenible”, por sus contribuciones para el fortalecimiento de los sistemas nacionales de ciencia y tecnología.
La distinción fue otorgada en el marco del evento de toma de posesión del Director General del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Manuel Otero, para su segundo periodo (2022-2026) al frente del organismo internacional, en el que se contó con la presencia y el respaldo de los ministros, ministras, secretarios y viceministros de Agricultura de las Américas, así como de altos funcionarios internacionales.
El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Argentina, Julián Domínguez, y el médico psiquiatra y fundador del Grupo Insud, Hugo Sigman, participaron de la ceremonia en la que se reconoció a Chan, investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), y quien se desempeña en el Instituto de Agrobiotecnología del Litoral, en la provincia argentina de Santa Fe.
La profesora titular de la Universidad Nacional del Litoral (Argentina), experta en Biología Molecular, se especializa en investigar y trabajar temas relacionados a la respuesta de las plantas al medio ambiente.
“Esto no es más que un premio para mí, es reiterar mi compromiso con el trabajo conjunto para la producción de plantas que no son sólo alimentos, las plantas nos dan mucho más que eso, además del oxígeno, muchas veces nos olvidamos, pero nuestra ropa, muebles, la mayoría de medicamentos, entonces, la producción de plantas es como el eje de la vida”, afirmó Chan.
Chan, quien cuenta con un doctorado en la Universidad Nacional de Rosario y un Postdoctorado en el Instituto de Biología Molecular de las Plantas de la Universidad Louis Pasteur, en Estrasburgo, Francia, se comprometió en seguir impulsando “mejor ciencia, educación, y formando personas calificadas que puedan multiplicar conocimientos y superarlos”, en pro de “un mundo mejor”.
“Nuestros países necesitan de más desarrollos que permitan producir más dentro de las mismas fronteras y considerando siempre el cuidado del medio ambiente, es por eso que necesitamos más ciencia, educación de calidad y también un eje que a veces nos lo olvidamos, que es la comunicación, saber comunicar la ciencia, lo que hacemos por el bien de todos los demás”, detalló.
Presente en la ceremonia, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina, Julián Domínguez, se refirió al trabajo de la Dra. Raquel Chan, indicando que “ha realizado un aporte científico extraordinario en la investigación en materia de resistencia de semillas a la sequía y por eso celebro que hoy reciba un muy merecido reconocimiento de parte del IICA”.
Durante la entrega del título el Subsecretario de Coordinación Política del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina, Ariel Martínez, resaltó que “figuras como la doctora Chan son un claro ejemplo de la importancia de seguir fortaleciendo nuestros sistemas científicos y tecnológicos y el fomento a la cooperación público y privada y al servicio de los intereses de nuestros productores”.
A su vez, Sigman, también Embajador de Buena Voluntad del IICA para temas de desarrollo sostenible, reconoció el liderazgo de Chan en el desarrollo del gen HB4, y su capacidad para “identificar el problema, abordarlo, crear un grupo humano, propiciar la cooperación público-privado sin prejuicios y cuidando los distintos intereses”, que hicieron más distintivo este proceso de investigación.
“Junto con todo esto desarrollar un conocimiento científico que colabore para que zonas marginales, con dificultades en la producción de algunos productos agropecuarios, tengan la posibilidad de acceder, porque el HB4 lo que hace fundamentalmente es mejorar la productividad en condiciones de poca humedad y suelos salinos, es de resaltar. Felicitarla por todo lo que ha hecho, lo que hace y lo que sé que seguirá haciendo en beneficio de la ciencia, la economía y la producción argentina”, valoró Sigman.
En esa misma línea, el Director General del IICA hizo hincapié en que precisamente el Instituto permanentemente busca “visibilizar y destacar el trabajo de las mujeres en la ciencia” y aboga siempre “por fortalecer los sistemas nacionales de ciencia y tecnología”.
“Raquel, que también es mamá, hace una contribución inigualable con su prédica para promover que nuestros países, en América Latina y el Caribe, alcancen los niveles de inversión en ciencia de Corea, Israel o Noruega, de cerca del 5% del PIB, porque ciencia, desarrollo sostenible y bienestar social van de la mano”, concluyó Otero.
El Programa “Cátedras IICA” fue creado con la convicción de que la agricultura debe ser una actividad que propicie oportunidades y progreso, así como resaltar contribuciones en un determinado campo de estudio, promoviendo y estimulando nuevos conocimientos sobre la agricultura y el desarrollo rural en el continente americano.
Esta distinción la ha recibido la Profesora Emérita de la Pontificia Universidad Javeriana, Elizabeth Hodson; el Profesor de Ciencias del Suelo y director del Centro de Gestión del Carbón y Captación de la Universidad Estatal de Ohio, Rattan Lal; el ex ministro de Agricultura de Brasil, Coordinador del Centro de Agronegocios de la Fundación Getúlio Vargas y titular de la Cátedra de Agronegocios de la Escuela Superior de Agricultura “Luiz de Queiroz”, de la Universidad de San Pablo, Roberto Rodrigues; el Instituto de Investigaciones Fisiológicas y Ecológicas Vinculadas a la Agricultura (IFEVA), de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, Argentina; el profesor del Departamento de Economía Agrícola y de Recursos Económicos de la Universidad de California, Berkeley, David Zilberman; y la investigadora mexicana en ingeniería genética y biología molecular, Gabriela Olmedo.