Ciudad de Panamá, (IICA).-
IICA, UE, BID, FAO, FONTAGRO y AGRO INNOVA organizaron en Panamá un foro para discutir las oportunidades de los bionsumos en la agricultura de las Américas e identificar posibilidades de trabajo conjunto.
Los bioinsumos son una herramienta para aumentar la productividad sostenible de la agricultura de las Américas, pues contribuyen a mejorar la salud integral, la generación de nuevas oportunidades económicas en los territorios rurales, la descarbonización, la sostenibilidad ambiental y la resiliencia climática, de acuerdo con autoridades agrícolas regionales e investigadores reunidos en Panamá.
El primer Foro Panamericano de Bioinsumos: perspectivas y oportunidades para un subsector en creciente desarrollo, se llevó a cabo en la capital panameña para abordar los desafíos y ventajas que estas materias primas biológicas ofrecen ante la necesidad de contar con sistemas agroalimentarios más sostenibles en las Américas y que produzcan más y mejores alimentos con recursos más limitados.
El encuentro fue organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Regional de Tecnología Agropecuaria (FONTAGRO, patrocinado por IICA y BID) y el proyecto Sistemas Agroforestales Adaptados para el Corredor Seco Centroamericano (AGRO INNOVA, financiado por la Unión Europea e implementado por IICA).
En la apertura participaron Alexis Pineda, Viceministro de Desarrollo Agropecuario de Panamá; Manuel Otero, Director General el IICA; Adolfo Campos, Jefe de la Sección Política y de Prensa de la Embajada de la UE en Panamá; Germán Zappani, Jefe de Operación de la Oficina del BID en este país; Adoniram Sánchez, Coordinador Subregional de la FAO; Arnulfo Gutiérrez, Director General del Instituto de Innovación Agropecuaria de Panamá y presidente de FONTAGRO; Eugenia Saini, Secretaria Ejecutiva de FONTAGRO; y Gerardo Escudero, Representante del IICA en Panamá.
“Los bioinsumos están en constante crecimiento y esto es una respuesta al elevado costo de los agroquímicos y su impacto en la salud pública, el medio ambiente, el clima y los requisitos de inocuidad que los países están estableciendo en el comercio”, expresó el viceministro Pineda.
“Los países de América Latina y el Caribe tendrán la oportunidad de aprovechar los resultados de este foro, para que los tomadores de decisiones tengan los elementos técnicos y científicos para crear políticas públicas a favor de disminuir la incertidumbre del abasto y el riesgo que representan el uso de agroquímicos”, agregó el funcionario panameño.
La conferencia magistral inaugural la impartió Mark Trimmer, cofundador y socio director de Dunham Trimmer, empresa especializada en el mercado de bioinsumos, quien explicó que estos productos son uno de los senderos de la bioeconomía con mayores crecimientos, en el que se espera que América Latina y el Caribe tenga un gran protagonismo internacional.
“El uso de bioinsumos está creciendo a tasas anuales cercanas al 13% en biocontroladores, bioestimulantes y biofertilizantes, superando en mucho las tasas de crecimiento de la agricultura tradicional. En biocontrol, que representa casi el 60% del mercado total de insumos biológicos, la región representa hoy el 20% del mercado total, de USD 1 231 millones, siendo la tercera en importancia y la que presenta mayores tasas de crecimiento”, afirmó Trimmer.
Agregó que para 2029 se espera que América Latina y el Caribe alcance el 29% del mercado total de biocontroladores y sea la región con mayor participación en el mercado mundial, por encima de Estados Unidos y Canadá.
“En nuestra región, factores como el alto precio de los fertilizantes químicos, la interrupción de la cadena de suministros, los aranceles comerciales y la necesidad de contar con sistemas agroalimentarios de menor impacto ambiental han impulsado la demanda y el uso de bioinsumos. Además, el enfoque de una salud y la necesidad de equilibrar productividad y sostenibilidad ambiental colocan a los bioinsumos como una alternativa estratégica”, expresó Manuel Otero, Director General del IICA.
Adolfo Campos, de la UE, advirtió que la producción de bioinsumos apoya la agricultura orgánica, la cual permite disminuir la dependencia de insumos externos, y contribuye a una agricultura más sostenible y ecológica.
“Durante 2022, el sector vivió una escalada en los costos de los fertilizantes que afectó los precios de los alimentos, por esto la UE busca fortalecer capacidades en la formulación y producción de bioinsumos, como una alternativa para mejorar la condición fisiológica de cultivos y para tener una mejor respuesta a los ataques de plagas”, agregó.
Los participantes en el encuentro coincidieron en que la guerra en Ucrania ha sido detonante para el aumento en los precios de los fertilizantes y su escasez en el mercado, por lo que este diálogo foro cobra gran relevancia en la búsqueda de alternativas para la producción de bioinsumos.
“Como Grupo BID estamos presentes para participar como co-organizadores de este primer Foro Panamericano de Bioinsumos, ya que entendemos la creciente importancia de los bioinsumos en los países de América Latina y el Caribe, y el potencial que tienen de ofrecer respuestas a los grandes retos que el sector agropecuario enfrenta a nivel económico, ambiental y comercial. El apoyo al desarrollo de bioinsumos también contribuye a nuestros objetivos en materia de fomento a la seguridad alimentaria, uno de los desafíos más apremiantes que enfrenta la región”, afirmó Germán Zappani, del BID.
Adoniram Sánchez, de FAO, destacó en el encuentro que «nuestro objetivo es aportar a la construcción de sistemas agroalimentarios que puedan satisfacer la creciente demanda de alimentos, sin comprometer la salud de nuestro planeta. Este foro es un paso importante en ese camino, proporcionando recomendaciones específicas basadas en un análisis detallado del uso y potencial de inversión de los bioinsumos en la región».
Arnulfo Gutiérrez, Director General del Instituto de Innovación Agropecuaria de Panamá y presidente de FONTAGRO, acotó que “consideran de enorme necesidad trabajar juntos en el desarrollo de nuevas tecnologías de bioinsumos como alternativa de sistemas agropecuarios más sostenibles y amigables con el ambiente. Desde las instituciones de ciencia, tecnología e innovación de la región se puede realizar un aporte realmente crucial en desarrollar tecnologías con base a la biodiversidad local; además las redes de Innovación cientifico-técnica de FONTAGRO son una herramienta única para lograr avanzar en ello”.
Los participantes en el foro concordaron en que América Latina y el Caribe tiene ventajas comparativas para promover los bioinsumos como una tecnología estratégica para la transformación de la agricultura, pero su aprovechamiento real requiere que los países realicen esfuerzos en la promoción de la ciencia, la tecnología y la innovación, la formulación e implementación de normativa, el fomento de instrumentos financieros adecuados y la promoción del mercado e inversiones productivas.