Managua.-
- Programa beneficiaría a cerca de un millón de personas en situación vulnerable
El Banco Mundial y el Ministerio nicaragüense del Ambiente y Recursos Naturales (MARENA) firmaron una Carta de Intención para un programa de pagos por resultados que promoverá el uso sostenible de los recursos forestales y la conservación de la biodiversidad en beneficio de cerca de un millón de personas en situación vulnerable de las Regiones Autónomas del Caribe, la Reserva de la Biósfera Bosawás y la Reserva Biológica Indio Maíz. El plan hace parte del programa de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Forestal conocido como REDD+.
“El Programa REDD+ para Combatir el Cambio Climático y la Pobreza representa un paso más de cara al fortalecimiento de las capacidades de las comunidades y familias productoras en el marco de las responsabilidades compartidas que el Gobierno ha venido impulsando desde un modelo de alianzas para la prosperidad”, señaló Juanita Argeñal, ministra de ambiente y recursos naturales, durante la firma realizada este jueves 21 de enero en Managua.
La idea de desarrollar este Programa fue presentada por MARENA ante el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques (FCPF por sus siglas en inglés) del Banco Mundial en octubre de 2015. La preparación y negociación de un eventual Acuerdo de Pagos por Reducción de Emisiones se realizará en el transcurso de los próximos 24 meses.
“Hoy queremos dejar clara nuestra intención de seguir colaborando con el país en el tema ambiental y de mitigación y adaptación al cambio climático”, dijo Humberto López, director del Banco Mundial para Centroamérica.
Este Programa en Nicaragua buscará la reducción de aproximadamente 11 millones de toneladas en emisiones de dióxido de carbono, según estimaciones preliminares de MARENA. De ser aprobado, el país podría recibir, a través del acuerdo firmado, hasta US$55 millones por concepto de pagos por resultados de parte del Fondo de Carbono del FCPF.
El FCPF provee incentivos para la reducción a gran escala de emisiones provenientes de la deforestación y la degradación forestal en países en desarrollo, proveyendo recursos financieros para el uso sustentable de los recursos forestales y la conservación de la biodiversidad en beneficio de futuras generaciones.