Managua | EFE.-
El Gobierno de Nicaragua felicitó este miércoles al papa Francisco por su sexto aniversario como pontífice de la Iglesia católica, y destacó su ejemplo de constancia, coherencia y confianza.
«Nos sumamos a la alegría de la Iglesia y de todas las familias católicas del mundo al cumplirse hoy seis años de su histórico pontificado», escribió el presidente del país, Daniel Ortega, en una carta dirigida a su santidad y que fue divulgada a la prensa.
En el documento, suscrito además por la esposa de Ortega, la vicepresidenta Rosario Murillo, señala que «en estos momentos de particular intensidad de su papado, oramos a diario por usted, para que el Señor le siga brindando salud e infinita fortaleza».
«Que su misión profética y su camino cotidiano estén llenos de la luz y sabiduría del espíritu santo, que le acompaña, estamos seguros, siempre», indicaron Ortega y Murillo en la carta.
«Que Dios nuestro Señor siga derramando sobre usted toda la fuerza, para que sus pasos en estas sendas difíciles, pero necesarias, sean mensaje y legado de una Iglesia peregrina que habla con la voz de la esperanza y la fe en un mundo mejor, donde el diálogo, la convivencia armoniosa, la justicia y la paz, sean permanente contribución a la alegría sencilla que todos merecemos», continuaron.
Asimismo, los dignatarios nicaragüenses agradecieron al papa Francisco «por darnos a todos ejemplo de constancia, coherencia y confianza en nuestra común humanidad».
Jorge Mario Bergoglio era arzobispo de Buenos Aires (1997-2013) cuando fue designado máximo represente de la Iglesia católica.
Oriundo del barrio porteño de Flores, se convirtió el 13 de marzo de 2013 en el primer pontífice procedente del continente americano para el orgullo de todos los americanos y, especialmente, de los argentinos.
Además, también es el único sucesor de Pedro que tiene sus raíces en la congregación jesuita y que lleva el nombre de Francisco de Asís, hombre que para Bergolio representa la pobreza y la paz.
Bergolio, quien destaca por su sencillez, cumple 2.191 días como papa a sus 82 años.