Reuters.-
El exembajador de Nicaragua en la Organización de Estados Americanos (OEA), Edgard Parrales, fue detenido el lunes en Managua, luego de que criticara la decisión del presidente Daniel Ortega de retirar a su país del organismo hemisférico.
Parrales es el primer detenido de peso luego de que Ortega asegurara su cuarto mandato consecutivo en las presidenciales de principios de mes, unos comicios fuertemente criticados por la comunidad internacional, liderada por Estados Unidos y sus aliados.
«Lo capturaron en su casa, no fueron policías con uniformes, sino dos personas de civil que se lo llevaron en carro», dijo la presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Vilma Núñez, quien dijo que recibió la información de parte de familiares del detenido.
Reuters intentó comunicarse con la Policía para corroborar la versión de Núñez, pero no obtuvo una repuesta de inmediato.
José Miguel Vivanco, director ejecutivo para las América de la ONG Human Rights Watch, criticó la medida.
«El mensaje de Ortega es claro: va a perseguir a cualquiera que lo critique. La OEA debe evaluar de manera urgente la suspensión de Nicaragua», escribió en Twitter.
Parrales fue embajador de Nicaragua ante la OEA en la década de 1980, durante el primer gobierno de Ortega, y es uno de los pocos analistas y críticos del mandatario izquierdista que no se ha exiliado.
La semana pasada, el gobierno de Ortega denunció la carta interamericana y anunció que saldría de la OEA, luego de que el organismo criticara la reelección de Ortega tras apresar a decenas de opositores y varios precandidatos presidenciales.
Parrales criticó la lamentó la decisión y aseguró que, «primero, (Ortega) tiene que respetar los derechos humanos, dejar de reprimir y liberar a los presos políticos».