Naciones Unidas | EFE.-
Nujeen Mustafa, una refugiada siria con discapacidad, llevó este miércoles su historia al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, donde reclamó protección para otras personas como ella afectadas por este y otros conflictos.
Mustafa, que sufre una parálisis cerebral y no puede caminar por sí sola, huyó de la guerra en Siria a los 16 años y, tras recorrer 5.600 kilómetros en su silla de ruedas, llegó a Alemania, donde vive desde entonces.
Desde la ciudad siria de Alepo, la joven cruzó Turquía, el Mediterráneo hasta Grecia y varios países europeos junto a su hermana hasta llegar a su destino final.
Su discurso de este miércoles fue la primera intervención formal en toda la historia de una persona con discapacidad ante el Consejo de Seguridad, que incluyó su testimonio en una reunión sobre la situación humanitaria en Siria.
Mustafa denunció ante las potencias el olvido en el que han quedado miles de personas con discapacidades afectadas por la guerra, que a menudo no pueden acceder ni siquiera a los servicios más básicos.
«Las personas con discapacidades estaban olvidadas en tiempos de paz. ¿Qué creen que ha ocurrido en tiempos de guerra?», subrayó, insistiendo por ejemplo en que las agencias humanitarias deben recopilar de forma sistemática datos sobre este colectivo para que sea protegido.
En ese sentido, pidió a todos los países donantes que incluyan programas específicos para personas con discapacidades en sus proyectos humanitarios, con el fin de garantizar que puedan acceder a servicios de salud y recibir apoyo de todo tipo.
«Esta no debería ser una reunión más, en la que hacemos grandes discursos y luego pasamos al siguiente punto del orden del día. Ustedes pueden y deben hacer más para asegurar que las personas con discapacidades estén incluidas en todos los aspectos de su trabajo. No podemos esperar más», subrayó.
La ONG Human Rights Watch (HRW) destacó en un comunicado la importancia de su testimonio para arrojar luz sobre los problemas adicionales a los que ese colectivo se enfrenta en los conflictos.
«El discurso de Nujeen Mustafa en el Consejo de Seguridad debería llevar a los miembros, a los líderes de la ONU y a todos los Estados miembros a asegurar que su compromiso humanitario de no abandonar a nadie no es sólo retórico», señaló Shantha Rau Barriga, directora de derechos para personas con discapacidades de HRW.
