Paula Díaz | Tucson | EE.UU. | EFE.–
Después de tres meses de un incremento inesperado en el cruce de menores solos y familias centroamericanas por la frontera sur de EE.UU., en enero pasado se registró un notable descenso que los activistas relacionan con el temor generado por las redadas ocurridas a principios de año.
«Mirando los números hay una reducción notable. En general no podemos decir a qué se deba esta disminución hasta que veamos lo que suceda en el mes de febrero, hay varios factores que pueden estar generando esto, como el cumplimiento de la ley con las redadas el día de año nuevo y otros factores que pueden estar pasando», dijo hoy a Efe Faye Hipsman, analista del Instituto de Políticas Migratorias (MPI).
La analista resaltó que en los estudios realizados en 2015 por el MPI se destacó el considerable aumento en las detenciones de centroamericanos en México y su posterior deportación a sus países de origen.
Por su parte, los activistas afirman que la presión del Gobierno estadounidense sobre México para el cumplimiento de las leyes migratorias sumadas a las condiciones climáticas pueden ser factores que influyan en la disminución de casi la mitad de arrestos en la frontera de Estados Unidos.
«Este es el resultado de la militarización de la frontera de México con Centroamérica y la financiación de Estados Unidos de las campañas en los países de Centroamérica para persuadir a los inmigrantes a iniciar la travesía», indicó Salvador Sanabria, director ejecutivo de la organización El Rescate.
Sanabria afirmó que su organización está trabajando en la reunificación de tres menores que están detenidos por las autoridades migratorias en México, lo que puede ser un ejemplo de lo que está ocurriendo con los menores en territorio mexicano.
«Estos tres menores están detenidos desde el 13 de noviembre, esto se convierte en un caso emblemático porque es lo que vemos como tendencia, los menores y las familias están siendo detenidas y deportadas desde México», afirmó Sanabria.
Mientras tanto, otros aducen este descenso al tenso ambiente que se generó a finales de diciembre con el anuncio de las redadas a familias centroamericanas que fueron efectivas los primeros días de año.
«Realmente puede contribuir el hecho de las redadas que generaron temor, también el que Estados Unidos enfoque sus esfuerzos en dar a conocer que no es cierto que al llegar a este país se puedan legalizar y del peligro que corren en su travesía», sostuvo Teresa Tejada, directora de la Asociación Salvadoreña en Los Ángeles (ASOSAL).
Unos 3.600 menores sin acompañante y 3.105 unidades familiares han sido detenidos en Arizona en el año fiscal 2016.
A pesar de la disminución a nivel nacional por esta área de la frontera, en las unidades familiares se ha presentado un incremento del 80 por ciento.
«Nosotros hemos visto la situación estable. Hay que reconocer que en Arizona la situación es diferente a Texas por donde ingresan la mayoría de los menores solos y las familias. Cuando tuvimos la crisis de 2014 fue porque enviaron a los menores y familias detenidas en Texas para Arizona», comentó hoy a Efe Joaquín Chacón, cónsul general de El Salvador en Tucson, Arizona.
El Gobierno estadounidense señaló que la disminución de enero es alentadora, sin embargo, dijo que esto no significa que se detendrán los arrestos y deportaciones de los inmigrantes que cruzaron la frontera desde el 1 de enero de 2014, las cuales afirman que continuarán.
«En enero de 2016, en general las aprehensiones en nuestra frontera suroeste (un indicador de intentos totales para cruzar la frontera de forma ilegal) se redujeron un 36 por ciento respecto al mes anterior, y fueron a los niveles más bajos desde enero del 2015», dijo el secretario del Departamento de Seguridad Interna (DHS), Jeh Johnson, en un comunicado.
«Además, en enero de 2016, las aprehensiones de los niños no acompañados se redujo en 54 por ciento en comparación con el mes anterior, y los arrestos de familias se redujeron en 65 por ciento en el mismo período», agregó.
Cifras del DHS indican que en lo que va del año fiscal 2016, que inicio el 1 de octubre, y al 31 de enero de 2016, 20.455 menores sin acompañante han sido detenidos en la frontera, lo que representa un incremento del 102 por ciento comparado con el mismo periodo del 2015.
Por otra, unas 24.616 unidades familiares fueron arrestadas, las cuales representan un 171 por ciento más que durante el mismo periodo de 2015.