Protesta de chalecos amarillos deja un herido en París

Una sindicalista de la CGT (Confederación General Trabajadora) protesta enfrente del Arco del Triunfo del Porte d’Aix durante una protesta en Marsella, sur de Francia, el martes 5 de febrero del 2019. (AP Foto/Claude Paris)
Por THOMAS ADAMSON | PARÍS | AP.-

Un participante de las protestas del movimiento chalecos amarillos perdió cuatro dedos de la mano durante enfrentamientos violentos entre manifestantes y policías en las calles de París el sábado, cuando aquéllos trataban de entrar a la fuerza a la Asamblea Nacional.
Esta es la decimotercera semana consecutiva de protestas de chalecos amarillos.
La policía confirmó que el herido perdió los dedos, mientras agentes se desplegaban para evitar que los manifestantes ingresaran al parlamento. La policía no pudo confirmar reportes noticiosos según los cuales el manifestante perdió los dedos debido a la explosión de una granada para dispersar revoltosos.
Mientras se desataban altercados entre manifestantes y policías enfrente de la Asamblea Nacional y la policía respondía con gases lacrimógenos, paramédicos atendieron al herido en la entrada de la Asamblea Nacional, evitando que manifestantes se le acercaran.
La policía dispersó con batones y gas lacrimógeno a los reunidos, algunos de los cuales lanzaron escombros a los agentes antimotines resguardados enfrente de la Asamblea Nacional.
El portavoz del departamento de bomberos, Gildas Lecoeur, dijo a The Associated Press que el herido fue llevado al hospital, pero no pudo confirmar su condición actual.
Los manifestantes quemaron un auto, motos y varios basureros conforme la protesta avanzó hacia el monumento Invalides, pero el ministerio del Interior dijo que las protestas de esta semana fueron significativamente más que pequeñas que la de las semanas pasadas.
La policía dijo que 17 manifestantes fueron arrestados, a la vez que se desataron más escaramuzas cerca de la avenida de Campos Elíseos y la Asamblea Nacional. La protesta iba a terminar cerca de la Torre Eiffel.
Los activistas chalecos amarillos, quienes han convocado a cientos de miles de personas a las calles en los últimos tres meses, ahora tratan de conseguir una victoria electoral, pero el movimiento está políticamente dividido y no han elegido a un líder.
El presidente Emmanuel Macron _blanco en gran medida de la cólera de los manifestantes _ parece estar recuperando algo del apoyo que perdió mientras trataba de tranquilizar al movimiento con un debate político nacional. Unas encuestas recientes indican que mejora la aprobación de Macron.

Deja un comentario

%d