Washington, DC, (OPS/OMS).-
Los nuevos casos de sífilis entre adultos de 15 a 49 años aumentaron 30% entre 2020 y 2022 en las Américas, según un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) titulado Implementación de las estrategias mundiales del sector de la salud sobre el VIH, las hepatitis virales y las infecciones de transmisión sexual, 2022-2030.
La sífilis, una infección bacteriana de transmisión sexual, es prevenible y curable, pero los casos han aumentado en todo el mundo en más de 1 millón en 2022, alcanzando un total de 8 millones. Las Américas se enfrentan actualmente a la mayor incidencia mundial, con 3,37 millones de casos (o 6,5 casos por cada 1000 personas), lo que representa el 42% de todos los nuevos casos.
El aumento de las infecciones por sífilis puede atribuirse a varios factores, como la insuficiente concienciación sobre la enfermedad, las disparidades en el acceso a los servicios de salud y en el diagnóstico y tratamiento, y el persistente estigma en torno a las enfermedades de transmisión sexual, que puede disuadir a las personas de buscar asistencia médica.
“Eliminar la sífilis y la sífilis congénita es posible, pero exige un enfoque integral que aborde la alta prevalencia de la sífilis en la población general, protegiendo a todos”, afirmó el Director de la OPS, doctor Jarbas Barbosa. “Los países deben reafirmar su compromiso político y acelerar el paso para poner fin a esta enfermedad prevenible y curable”, añadió.
Si no se trata, la sífilis puede causar graves problemas de salud, como enfermedades cerebrales y cardiovasculares. Muchas personas con sífilis no tienen síntomas o no los notan. Las pruebas rápidas de detección permiten el inicio oportuno del tratamiento. El uso correcto y consistente del preservativo durante las relaciones sexuales puede prevenir la sífilis.
La sífilis también puede transmitirse durante el embarazo, provocando complicaciones graves como aborto espontáneo, muerte fetal, parto prematuro, bajo peso al nacer, anomalías congénitas, lesiones en órganos como el hígado, el bazo y los huesos, así como daños neurológicos.
El informe publicado esta semana por la OMS también destaca un aumento de los casos entre las mujeres embarazadas. En la región, el porcentaje de embarazadas con sífilis aumentó un 28% en los dos últimos años.
Esta tendencia se ha traducido en un aumento de la sífilis congénita, que alcanzó un estimado de 4,98 casos por 1000 nacidos vivos en 2022, superando significativamente la meta de la OMS de 0,5 casos por 1000 nacidos vivos. Ese año se estima que 68.000 bebés nacieron con sífilis en la región.
“Debemos reforzar los servicios de atención prenatal para garantizar la prueba universal de sífilis a todas las embarazadas y el tratamiento rápido y adecuado de las que den positivo y de sus parejas sexuales si queremos lograr la eliminación de la sífilis congénita para 2030”, sostuvo el doctor Sylvain Aldighieri, Director del Departamento de Prevención, Control y Eliminación de Enfermedades Transmisibles de la OPS.
La OPS recomienda a los países aumentar la sensibilización pública sobre la sífilis, incluidas sus vías de transmisión y las medidas preventivas. También, ofrecer pruebas rápidas para el diagnóstico temprano y asegurar el tratamiento oportuno y adecuado con penicilina para curar eficazmente la infección, evitando así la transmisión de la enfermedad y las posibles complicaciones.
La Organización trabaja con los países de las Américas para mejorar la vigilancia de la sífilis y fortalecer las capacidades del personal de los servicios de atención prenatal para la sífilis y la sífilis congénita. La OPS también colabora con las comunidades y la sociedad civil para abogar y promover la eliminación de estas enfermedades. Tanto la sífilis como la sífilis congénita están incluidas en la Iniciativa de Eliminación de la OPS, cuyo objetivo es poner fin a más de 30 enfermedades y afecciones relacionadas para 2030.
A nivel regional, la OMS ha certificado a 11 países y territorios de las Américas por eliminar la transmisión maternoinfantil del VIH y/o la sífilis desde 2015.