NUEVA YORK | AP.-
El mercado bursátil neoyorquino cayó el viernes en todos los sectores en la que fue la jornada de mayores transacciones en el año al disiparse el entusiasmo por un muy esperado aumento en las tasas de interés de Estados Unidos.
Varios otros factores negativos se combinaron para que la bolsa de valores cerrara con su segunda mayor pérdida en el año, lo que redujo aún más los niveles de los índices en la semana.
Las acciones de los bancos, en las que los inversionistas habían puesto sus esperanzas de que serían más rentables al subir las tasas de los préstamos, fueron las que sufrieron un desplome más amplio. Las de tecnología registraron mayores descensos al empeorar un diciembre ya de por sí negativo para Apple. La compañía que cotiza en bolsa más valiosa del mundo volvió a bajar y sumó un 10% de pérdida en el mes.
En el extranjero, el mercado de Japón retrocedió después de que el banco central de ese país hizo cambios a un programa de estímulos que estuvo por debajo de las expectativas de los inversores. Otra caída en los precios de los energéticos provocó una baja adicional en las acciones petroleras, y los temores en torno a un crecimiento global débil influyeron en las empresas navieras y otras de transporte.
El promedio industrial Dow Jones se hundió 367,29 puntos, 2,1%, a 17.128,55, mientras que el índice Standard & Poor’s 500 se desplomó 36,34 unidades, 1,8%, para cerrar en 2.005,55. El compuesto tecnológico Nasdaq bajó 79,47 puntos, 1,6%, a 4.923,08. Los 10 sectores del Standard & Poor’s 500 cayeron.
Las operaciones bursátiles estadounidenses fueron incluso más volátiles que lo usual en un viernes debido a la expiración simultánea de varios tipos de contratos de futuros y otros tipos que los inversionistas usan para pujar en índices y acciones individuales. Como resultado, el viernes fue el día de operaciones más activo en el año para las acciones.
El mercado cerró una semana agitada con una ligera baja. Las acciones se habían recuperado en los primeros tres días y dieron un salto el miércoles cuando la Reserva Federal aumentó la tasa de interés por primera vez en casi una década. La medida fue un voto de confianza para la economía estadounidense, pero en los siguientes dos días las acciones se vieron afectadas por fuertes preocupaciones que las habían afligido todo el año, como la debilidad en la economía china, una ralentización en el crecimiento mundial y los precios en picada de los energéticos y los metales.
El precio del crudo estadounidense cayó 22 centavos a 34,73 dólares el barril en Nueva York. El petróleo se está vendiendo a su nivel más bajo en casi siete años y se ha desplomado en los últimos dos días. El crudo Brent, de referencia para el petróleo internacional, bajó 18 centavos a 36,88 dólares en Londres.
Los precios de los metales también subieron el viernes. El precio del oro aumentó 15,40, el 1,5%, a 1.065 dólares la onza, y la plata recuperó 39.3 centavos, 2,9%, a 14.096 dólares la onza. El cobre subió 6,9 centavos, 3,4%, a 2,113 dólares la libra.
Los precios de los bonos del gobierno estadounidense subieron. El rendimiento de la nota del Tesoro a 10 años cayó a 2,21% de 2,23%.