Washington | EFE.-
EE.UU. rechazó hoy acoger o dejar entrar a su territorio a Hoda Muthana, una mujer que supuestamente huyó de Alabama en 2014 para unirse al Estado Islámico (EI) y que ahora ha dicho estar «arrepentida» de haberlo hecho.
«La señora Hoda Muthana no es una ciudadana de EE.UU. y no será admitida. No tiene ningún fundamento legal, ni ningún pasaporte válido de EE.UU., ni ningún derecho a un pasaporte ni visado para viajar a EE.UU. Seguimos recomendando a todos nuestros ciudadanos que no viajen a Siria», señaló el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un comunicado.
Muthana es una joven de 24 años que aseguró recientemente en una entrevista al diario británico The Guardian estar «profundamente arrepentida» de haber viajado desde EE.UU. a Siria para unirse al EI y pidió al Gobierno estadounidense que le deje volver a Alabama con su familia.
«Estábamos básicamente en un momento de ignorancia y luego nos convertimos en yihadistas, si te gusta describirlo de esa manera. Pensé que estaba haciendo las cosas correctamente por Dios», argumentó Muthana, que ahora se encuentra en el campo de refugiados de al-Hawl, en el norte de Siria.
Muthana fue muy activa en internet para pedir que «se derramara» la sangre de los estadounidenses.
«¡Estadounidenses despierten! Tienen mucho que hacer mientras viven bajo nuestro mayor enemigo. Disparad desde el coche y derramad toda su sangre, o alquilad una furgoneta grande y conducid sobre ellos. En el Día de los Veteranos, el Día de los Caídos… Matadlos», llegó a tuitear Muthana desde su cuenta de Twitter.
En la entrevista con The Guardian la mujer dijo que su familia en Alabama era «profundamente conservadora» y que puso restricciones a sus movimientos e interacciones sociales, unos factores que según ella contribuyeron a su radicalización.
«Yo quería salir con mis amigos y no podía. Me centré en la religión y lo hice demasiado fuerte. Fui autodidacta y pensé que lo que leía estaba bien», explicó.
Asimismo, Muthana apuntó que ahora está «preocupada» por el futuro de su hijo.
«Ahora miro hacia atrás y creo que fui muy arrogante. Ahora estoy preocupada por el futuro de mi hijo. Al final no me quedaron muchos amigos, porque cuanto más hablaba de la opresión de EI, más amigos perdía», agregó.
La entrevista en exclusiva con el diario británico, publicada el pasado domingo, provocó que medios de comunicación de todo el mundo se interesaran en la figura de Muthana y escribieran sobre su situación en el campo de refugiados.